Casar de Burbía es un vino tinto elaborado por la bodega de la que toma el nombre, bajo la D.O. Bierzo, un monovarietal 100% Mencía. Los racimos para elaborar los vinos de la gama Casar de Burbia proceden de los diferentes pagos de situados en el fondo del valle de Valtuille de Arriba. En concreto para elaborar este vino se utilizan uvas mencía procedentes de pagos bajos arcillosos de la Finca Valdepiñeiro. El pequeño mencía de la casa es un vino elegante, sensual y potente, imposible dar más por menos.
Vista:
Vino limpio y brillante color rojo púrpura, con lagrima densa y capa alta.
Nariz:
Aromáticamente complejo, frutas rojas y negras con ligeras notas florales, hierbas aromáticas. Si movemos la copa percibimos caramelo y notas de crianza.
Boca:
En boca es sabroso, potente, con una excelente acidez. Los taninos nos dan sensación de redondez.
- Tipo
- Tinto Crianza
- Denominación de Origen
- Bierzo
- Variedad
- 100% Mencía
- Puntos
- 91 Peñín
- Maridaje
- Su perfecta armonía le permite maridar infinidad de platos como carnes rojas y a la parilla, caza, asados, embutidos, foie y platos de cuchara.
- Vinificación
- Vendimia y prensado manualmente. La fermentación alcohólica a temperatura controlada, no superior a 25 ºC. Posteriormente el vino resultante permanece sobre sus finas lías dos meses.
- Consumo
- Se recomienda servir a 16 ºC
- Cosecha
- 2017
- Formato de botella
- 750ml
- Envejecimiento
- Crianza de 12 meses en barrica de roble francés.
Una historia familiar de viticultores desde su fundación hacia finales de los años 80 a manos de Nemesio Fernández Bruña hasta que su hijo menor, Isidro Fernández, recogió el testigo.
El fundador de la bodega, un visionario del bierzo, estaba obsesionado por los viñedos viejos de montaña de Valtuille de Arriba, que por entonces estaban abandonados dado su bajo rendimiento en comparación con las parcelas del valle, mucho más fértiles. Casar de Burbia actualmente cuenta con 27 hectáreas de viñedo divididas en 52 pagos, en su mayoría centenarios y de gran altitud, ubicado a los pies del Camino de Santiago. En su mayoría la variedad autóctona de la zona, Mencía, y una pequeña parte de Godello.
Un concepto fundamental a la hora de entender la filosofía de la bodega es diferenciar cada uno de sus pagos en tres partes, bajo, medio y alto. Las zonas altas son las más valoradas por la Denominación de Origen, a las que se denominan Tebaidas, nombre también utilizado por los vinos a los que dan lugar. Por otro lado se pretende mantener el legado de los viñedos desde una viticultura sostenible y ecológica, manteniendo la identidad de cada una de sus cepas y asegurando así el futuro de las viñas.
Las parcelas que componen la bodega poseen suelos rojizos y pizarrosos otorgando a sus vinos de gran personalidad y mineralidad.
También puede interesarte